El cambio de estación es un fenómeno natural que, aunque esperado, trae consigo una serie de transformaciones que afectan a nuestros árboles de manera significativa. Se trata de un extremo que te podemos confirmar desde Os das Árbores, tu empresa de poda y tala de árboles en Ponteareas, y que resulta imprescindible entender si buscamos mantener un jardín saludable y lleno de vida durante todo el año. Hablamos sobre ello en este artículo.
Primavera: el renacer de la naturaleza
Con la llegada de la primavera, los árboles experimentan un resurgimiento. Las temperaturas más cálidas y el aumento de la luz solar permiten que broten nuevas hojas. Se trata del momento en que los árboles comienzan a recuperar las energías gastadas durante el invierno, con un crecimiento que encuentra el mejor respaldo en una poda ligera con la que eliminemos ramas muertas o dañadas para fomentar un desarrollo saludable.
En verano los árboles alcanzan su plenitud
Durante el verano, los árboles están en su máximo esplendor. Sin embargo, esta estación también trae desafíos, como el estrés hídrico debido a las altas temperaturas. Es vital asegurarse de que reciban suficiente agua, especialmente durante las olas de calor, que cada vez son más frecuentes. Como expertos arboricultores en Ponteareas, recomendamos gestionar un riego profundo y regular, ya que puede ayudar a mantener el suelo húmedo y las raíces bien hidratadas.
El mulching, o acolchado, es otra técnica valiosa durante el verano. Al cubrir la base del árbol con una capa de material orgánico, se reduce la evaporación del agua y se mantienen las raíces frescas.
Otoño: preparando el descanso
El otoño es una estación de transición, donde los árboles comienzan a prepararse para el reposo invernal. Las hojas cambian de color y caen, un proceso que no solo embellece el paisaje, sino que también es crucial para la supervivencia del árbol. Durante esta época, es importante limpiar regularmente las hojas caídas para prevenir enfermedades y plagas.
También es un buen momento para realizar una poda más intensiva, eliminando ramas muertas o enfermas para mejorar la salud del árbol y reducir el riesgo de daños durante las tormentas invernales.
Invierno: tiempo de reposo
En invierno, los árboles entran en un estado de latencia. Aunque parece que no hay actividad, debajo del suelo las raíces continúan creciendo y almacenando nutrientes. Proteger los árboles jóvenes con protectores de tronco puede prevenir daños por heladas y animales.
Es fundamental evitar la fertilización en invierno, ya que puede estimular un crecimiento inadecuado y susceptible a daños por el frío. Sin embargo, es una buena época para planificar el jardín y preparar el suelo para la primavera.
¿Necesitas ayuda con el cuidado de tus árboles en Ponteareas?
Si los cambios de estación te suponen un desafío para el cuidado correcto de tus árboles, en Os das Árbores estamos a tu disposición. Solo tienes que contactar con nosotros y un equipo de expertos estará disponible para ayudarte a cuidar tus árboles como merecen.